Rocio es única y se encuentra con una gran sorpresa en cuanto baja del avión en Edimburgo. Tiene que hacerse pasar por alguien que no es y no sabe como saldrá de esa y vivir un mes entre Highlanders... eso si que le hace ilusión. Pero allí se encuentra con un barbas que le mira como si fuera un ser de otro planeta y que parece no caerle muy bien. Ninguno de los dos tiene una buena primera impresión (¿o sí?) pero con el tiempo las situaciones que viven te harán troncharte y como no, enamorarte.
Vamos allá con la cita de hoy.
—El bable es la lengua de los asturianos, como su gaélico —respondió ella en voz baja. No se dio cuenta que se había girado en el asiento para quedar frente a él.
—De modo que incluso tienen su propio idioma.
—Algunos no lo considerarían como tal, pero para nosotros lo es.
—Nosotros…
Pegó un respingo cuando él alzó una mano y acarició su mejilla con los nudillos. Qué caricia tan… delicada.
—Es… imposible no sentirse asturiana. Las… montañas me robaron hace mucho tiempo el… corazón.
—Es curioso —matizó él, mirando su piercing con embelesamiento—. Me describes tu tierra, pero yo veo la mía.
—Eso es porque son muy parecidas.
Por todos los santos, qué cerca estaban el uno del otro. ¿Cómo habían llegado a esa situación?
—Quizá por eso tuve la sensación de que pertenecías a este lugar la primera vez que te vi bajo el sauce.
—Quizá —murmuró ella, con el corazón latiéndole a mil por hora cuando una mano pesada se dejó caer en su muslo.
—Es posible que Asturias te robara el corazón. Sinceramente, espero que las Highlands te roben el alma.
¿Por qué el murmullo de un hombre sonaba a ronroneo? ¿Por qué era tan sumamente erótico?
—Quizá ya lo haya hecho. ¿Qué… qué hace, laird? —preguntó un tanto alarmada cuando él inclinó la cabeza y comenzó a buscar sus labios.
—No lo sé, Ro. De verdad que no lo sé…
Ya no hubo palabras, sino una boca que buscaba otra; labios que se encuentran en un primer tanteo, un roce pidiendo permiso y un acercamiento concediéndolo.
(Rocío y Colin en Highlander tenías que ser)
—De modo que incluso tienen su propio idioma.
—Algunos no lo considerarían como tal, pero para nosotros lo es.
—Nosotros…
Pegó un respingo cuando él alzó una mano y acarició su mejilla con los nudillos. Qué caricia tan… delicada.
—Es… imposible no sentirse asturiana. Las… montañas me robaron hace mucho tiempo el… corazón.
—Es curioso —matizó él, mirando su piercing con embelesamiento—. Me describes tu tierra, pero yo veo la mía.
—Eso es porque son muy parecidas.
Por todos los santos, qué cerca estaban el uno del otro. ¿Cómo habían llegado a esa situación?
—Quizá por eso tuve la sensación de que pertenecías a este lugar la primera vez que te vi bajo el sauce.
—Quizá —murmuró ella, con el corazón latiéndole a mil por hora cuando una mano pesada se dejó caer en su muslo.
—Es posible que Asturias te robara el corazón. Sinceramente, espero que las Highlands te roben el alma.
¿Por qué el murmullo de un hombre sonaba a ronroneo? ¿Por qué era tan sumamente erótico?
—Quizá ya lo haya hecho. ¿Qué… qué hace, laird? —preguntó un tanto alarmada cuando él inclinó la cabeza y comenzó a buscar sus labios.
—No lo sé, Ro. De verdad que no lo sé…
Ya no hubo palabras, sino una boca que buscaba otra; labios que se encuentran en un primer tanteo, un roce pidiendo permiso y un acercamiento concediéndolo.
(Rocío y Colin en Highlander tenías que ser)
Contadme, ¿la habéis leído? ¿Os gusta tanto como a mi Highlander tenías que ser?
Hola Patri!! Yo me lo leí hace poco y me gustó mucho, pasé un rato muy divertido ya que como tú dices hay situaciones que te hacen reír :-)
ResponderEliminarEs lo primero que leo de Laura Nuño pero no será lo último.
Un beso!!!
Hola, pues sí, para mi también ha sido el primero y único que me leído de su autora pero tampoco será el último. Un besito guapa.
Eliminarme lo apunto
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